Kenneth MacAlpin (Cináed mac Ailpin, 810 – 13 de febrero de 858), conocido en la mayoría de las fuentes modernas como Kenneth I, fue un rey de los pictos que, según el mito nacional, se considera el primer rey de los escoceses.
El ascenso de Kenneth puede ubicarse en el contexto de la caída de la dinastía reinante anterior, que había dominado el norte de Gran Bretaña durante varias generaciones.
Según los anales del Ulster, en una batalla fechada en 839, los #vikingos mataron al rey de Fortriu, Eógan mac Óengusa, al rey de Dál Riata Áed mac Boanta y a varios caudillos del norte, lo que permitió a Kenneth tomar el trono.
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